Cuando Gordon Williams, británico de 80 años, dejó aparcado su Mercedes y se propuso a hacer sus recados no sabía que, al regresar encontraría una ventana rota.
Sucede que un transeúnte observó que había un perro respirando con dificultad dentro del carro. Entonces llamó a un policía para rescatar al animal. Los agentes llegaron y rápidamente rompieron una de las ventanillas del asiento trasero del vehículo. Entonces se dieron cuenta que... ¡estaban rescatando a un perro de peluche!. El muñeco físicamente tiene la apariencia de un perro y simula estar respirando como uno de verdad.
Gordon asegura no estar enfadado por lo ocurrido "sé que el peluche es bastante realista y si no estaban seguros de ello, hicieron lo correcto, no queremos que más perros mueran por el calor de un coche" declaró.
"Este es un ejemplo perfecto de por qué los conductores tienen que pensar acerca de lo que dejan a la vista en su coche, tanto en términos de percepción de otras personas de los objetos y en un intento de disuadir a los ladrones oportunistas", informó la policía en un comunicado.
